La moda después de la pandemia
Las grandes crisis han traído grandes cambios en la cultura popular, incluida la cultura. La gripe española o la Primera Guerra Mundial introdujeron cambios. Debido al Coronavirus, diseñadores, organizadores de desfiles, productores han ajustado su actividad a esta “nueva normalidad en la que nos encontramos”.
¿Qué sucederá luego de la pandemia? Después de 6 meses de aquel momento en que se empezó a decretar el estado de alarma en casi todo el mundo, esta sigue siendo una de las tantas preguntas que frecuentemente nos hacemos. Aunque no hay una respuesta concreta, con el paso del tiempo hemos ido dejando atrás las preocupaciones y ocupándonos en lo nuestro para cuando todo esto acabe.
Las grandes pasarelas del mundo no pudieron este año presentar sus colecciones de forma habitual. La pandemia impidió las aglomeraciones de personas, por lo que esos eventos que reunían a miles de personas han sido cosa del pasado. Muchos han tenido versiones online, pero con menor impacto y repercusión.
Definitivamente las mejores oportunidades surgen en tiempos de crisis como los que vivimos actualmente, prueba de ello es la firma Christian Dior que después de la Segunda Guerra Mundial, cambió la industria de la moda para siempre.
La moda es una manifestación de la cultura y la inspiración de los diseñadores está basada en recuerdos y experiencias, el mundo está en constante movimiento y el sector de la moda cambia con él. Después de la pandemia continuará la necesidad de sentirnos protegidos, cultivar una buena salud mental y física así como la preferencia por comprar a través de internet y la incorporación de guantes y mascarillas a los complementos habituales.
Sin duda alguna, uno de los mayores cambios a los que se enfrentará la industria de la moda será de ritmo. Giorgio Armanim quien decidió celebrar su desfile de otoño-invierno 2020-2021 en Milán a puerta cerrada el pasado febrero, mantuvo sus diseños de primavera-verano hasta septiembre, una práctica muy poco común pero que este año parece tener mucho sentido. De igual forma Donatella Versace afirma que le gusta la idea de ir más despacio con las temporadas.
La situación que vivimos actualmente también debería acelerar los cambios en el comportamiento de los consumidores, especialmente entre las generaciones más jóvenes. Se espera que la gente preste mayor atención a la huella ambiental de los productos, a la contribución de las marcas a la sociedad, y por ende exista una mayor demanda de transparencia y trazabilidad.
El momento de reapertura de tiendas fue muy positivo, la mayoría de las firmas de moda tuvieron un incremento en sus ventas por parte de los clientes fieles, sin embargo esto fue una burbuja, un efecto que no continuó en los siguientes meses.
